Una pareja perseguida por okupas que presuntamente se apoderaron de su dúplex de renta

Una supuesta pareja de ocupantes ilegales, acusada de mudarse ilegalmente a un dúplex en Queens, Nueva York, está demandando a sus legítimos propietarios después de negarse a desalojar la casa valorada en más de un millón de dólares.

“Es absolutamente absurdo”, dijo el domingo al New York Post la propietaria del edificio, Juliya Fulman, que hasta ahora ha acumulado más de 5.500 dólares en honorarios legales.

“Estas personas literalmente irrumpieron en mi casa. No es justo para nosotros, como propietarios, no estar protegidos por el Ayuntamiento”, lamentó el propietario.

En el distrito donde se encuentra el dúplex en el centro del conflicto, los ocupantes ilegales sólo necesitan ocupar una propiedad durante 30 días para beneficiarse de una amplia gama de protecciones legales que dificultan al propietario desalojarlos.

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“En cierto modo, no se les puede culpar, porque la situación se les entrega en bandeja de plata”, argumentó Denis Kurlyand, el marido de Juliya.

“Es necesario hacer algo porque el problema no hace más que empeorar. La gente se está aprovechando de estas leyes, manipulándolas, y tenemos las manos atadas. ¿Qué hemos hecho? No hicimos nada. Alquilamos una propiedad y ya está, ahora estamos ante una pesadilla”, añade.

Cerraduras cambiadas

Fue su corredor de bienes raíces quien descubrió, cuando se encontraron inquilinos para las unidades de alquiler recientemente renovadas, que las cerraduras del edificio habían sido cambiadas a principios de marzo.

Cuando su corredor fue a su auto para llamar a la policía, dos hombres salieron de la residencia y rodearon su auto estacionado frente a la casa, informa el New York Post.

Cuando llegó la policía, los dos presuntos ocupantes ilegales afirmaron que vivían allí desde enero, pero no pudieron aportar pruebas.

Los hombres abandonaron la casa sin incidentes. Los propietarios expresaron entonces su intención de cambiar las cerraduras.

La policía les dijo que, si lo hacían, los arrestarían.

A mediados de marzo, otra propietaria de Queens, Adele Andaloro, de 47 años, fue arrestada por cambiar las cerraduras de su casa en un esfuerzo por librarla de ocupantes ilegales.

Pulso

Los ocupantes ilegales regresaron a la propiedad un día después, blandiendo lo que, según ellos, era un contrato de alquiler firmado por el agente inmobiliario.

Pero Juliya y Kurlyand estaban preparados.

Presentaron a la policía documentos de propiedad y vídeos que mostraban que la casa estaba desocupada.

Luego, la policía escoltó a los hombres fuera de la propiedad y los propietarios cambiaron las cerraduras.

Procedimiento legal

Al entrar, la pareja encontró su casa recién renovada dañada por okupas.

Pisos de madera desgastados, rayones en las paredes y el olor a marihuana impregnando la residencia.

Diez días después, su corredor de bienes raíces recibió documentos judiciales que le informaban que los hombres la estaban demandando a ella, a la pareja y a la compañía de bienes raíces que maneja el sitio, Top Nest Properties.

Según los propietarios, los ocupantes ilegales falsificaron documentos.

Cuando la pareja preguntó al juez si, mientras tanto, podían dejar que sus inquilinos se mudaran, el juez respondió que hacerlo antes de que se aplazara el caso podría complicar aún más las cosas.

“El sistema legal no es amigable con los propietarios”, concluyó Kurlyand.

“¿Puede llevar años desalojar a alguien que irrumpió en tu casa ilegalmente? ¿Dónde está la ley en todo esto? ¿Por qué trabajar duro para pagar el alquiler o una hipoteca cuando puedes irrumpir en la casa de alguien cada dos años y vivir con lujo?

La próxima audiencia está prevista para el 5 de abril.