La policía que encontró un arma cargada en un ‘bolso’ no perfiló al sospechoso: juez de Quebec

Dos agentes de policía de Montreal tuvieron justificación para detener y registrar a un hombre después de que sospecharan de su “monedero de hombre” y su comportamiento, según determinó un juez de un tribunal de Quebec.

La policía detuvo a Marcus Nimeri, de 24 años, en octubre de 2023 y encontró una pistola cargada que había sido modificada ilegalmente en su bolso.

Pero su abogado, David Leclair, argumentó que el arma no debería haber sido admitida como evidencia porque la policía no tenía motivos para detener a Nimeri, quien no estaba cometiendo ningún delito al usar el pequeño bolso mientras caminaba por una calle de la ciudad durante el día.

Pero el juez del Tribunal de Quebec, Dennis Galiatsatos, escribió en su decisión del 18 de abril que las pruebas presentadas durante el juicio demostraban que esas bolsas se utilizan a menudo para portar armas de fuego.

“Para disipar cualquier ambigüedad, los agentes de policía pueden – y deben – ciertamente prestar especial atención a los bolsos de los hombres, a la luz de otras pruebas”, escribió, añadiendo que esos bolsos de hombro son “el escondite ideal” y que es más probable que los delincuentes llevan sus armas en bolsas de este tipo en lugar de metidas en sus pantalones o en sus tobillos.

“Dadas las circunstancias, si un oficial de policía ignorara una pista como esta, sería prueba nada menos que de incompetencia”, dijo Galiatsatos.

Leclair había argumentado que su cliente había sido perfilado porque los bolsos de hombro como el suyo son populares entre los hombres de las comunidades negra y árabe. Galiatsatos rechazó ese argumento, diciendo que no se presentó evidencia de que la bolsa estuviera vinculada a comunidades racializadas específicas.

“Ciertamente es deplorable elaborar perfiles de sospechosos en función de su raza, origen étnico, religión, sexo, orientación sexual aparente o pertenencia a una clase social marginada. Sin embargo, según el tribunal, estos principios no se aplican a una clase de accesorios de moda”, concluyó Galiatsatos. “La categoría ‘personas con una cartera’ no es un grupo protegido y no debería convertirse en uno”.

Dos agentes de policía, Nicolas Boivin y Patrick Laleyan, testificaron que vieron a Nimeri en una intersección mientras estaban detenidos en un semáforo en rojo, escribió Galiatsatos. Sus sospechas aumentaron cuando los vio y rápidamente se dio la vuelta y comenzó a caminar en dirección contraria, quitando la bolsa de su vista, según la sentencia.

El hecho de que llevara su teléfono celular en el bolsillo sugería que había algo más en el bolso, dijeron los oficiales al tribunal, y la forma en que llevaba el bolso era típica de alguien que porta un arma.

Ambos agentes testificaron que la mayoría de las armas que habían incautado estaban transportadas en bolsas similares. Laleyan, que había estado involucrado en 30 incautaciones de armas, dijo que las bolsas eran tan perfectas para llevar un arma que las había usado cuando trabajaba vestido de civil.

Galiatsatos dijo que no hay nada “reprensible o problemático” en que los agentes de policía consideren las bolsas como una señal, entre otras, de que alguien podría estar portando un arma.

El comportamiento de Nimeri antes y después de que la policía lo detuviera era lo suficientemente sospechoso como para justificar la búsqueda, que encontró el arma ilegal, modificada para disparar sólo en modo completamente automático, concluyó el juez.

“El tribunal determina que los agentes Boivin y Laleyan no sólo tenían derecho a registrar el bolso de Nimeri, sino que tenían que hacerlo. Tienen la responsabilidad de proteger las vidas del público, así como la suya propia”, escribió.

Galiatsatos encontró a Nimeri culpable de poseer un arma prohibida cargada, portar un arma oculta y obstruir a un agente del orden público.

“Si los jóvenes no están contentos con la atención que los bolsos de hombre atraen por parte de los agentes de policía, simplemente no tienen que usarlos”, escribió el juez. “Durante décadas, a los hombres les ha ido bien sin bolsos. No hay nada que temer: las carteras todavía existen, al igual que los bolsillos en los pantalones y en los abrigos”.