La planta de baterías para vehículos eléctricos de Northvolt necesitará cerca de una docena de autorizaciones ambientales antes de que se pueda completar la construcción

Northvolt, el fabricante sueco de baterías para vehículos eléctricos que construye una planta de 7 mil millones de dólares en las afueras de Montreal, necesitará alrededor de una docena de autorizaciones ambientales de los gobiernos para completar la construcción.

El miércoles, la compañía proporcionó información actualizada sobre lo que se ha logrado hasta ahora y lo que aún queda por hacer. La empresa aún está a la espera de la autorización ministerial para seguir adelante.

Northvolt también tendrá que presentar documentación a finales de este año para una parte de su proyecto que estará sujeta a una evaluación ambiental por parte de la Oficina de audiencia pública sobre el medio ambiente (BAPE).

Una de las autorizaciones necesarias para iniciar la construcción será para la toma y descarga de agua al río Richelieu.

El agua del río Richelieu es el hogar del pez caballo rojo, en peligro de extinción, y se utiliza para enfriar el equipo.

Si la empresa no obtiene autorización para sacar agua del río, se están estudiando otras opciones, como construir “torres de refrigeración”, pero esta alternativa no es sostenible, según la dirección de Northvolt.

Paolo Cerruti, director general de Northvolt, anunció que publicará los principales documentos relacionados con el BAPE y las autorizaciones ministeriales en el sitio web de la empresa, para que estén a disposición del público.

Humedales y árboles afectados por la construcción

Hasta 450 camiones viajarán de ida y vuelta al lugar en el marco de la construcción de los primeros edificios en el terreno que se extiende a caballo entre los municipios de Saint-Basile-le-Grand y McMasterville.

Se implementarán varias medidas de mitigación, como el uso de lonas en los camiones para evitar que se propaguen polvo y escombros.

En el lado de McMasterville habrá que eliminar cerca de 9.500 árboles vivos y muertos. En Saint-Basile-le-Grand, se talaron más de 14.000 árboles.

El mes pasado, Northvolt recibió una notificación de incumplimiento del Ministerio de Medio Ambiente, Lucha contra el Cambio Climático, Vida Silvestre y Parques de Quebec debido a una “tala accidental de maleza” y a la limpieza de un pantano que no debería haber sido limpiado.

La empresa afirma que ya ha propuesto medidas correctoras al Ministerio de Medio Ambiente, concretamente la plantación de siete cornejos de hojas alternas, siete cornejos y siete sauces amarillos al finalizar los trabajos de preparación del terreno. La plantación debería finalizar esta primavera.

Northvolt sostiene que se retirarán del lugar 6.240 árboles vivos y 3.344 árboles muertos y que se replantarán 2,5 árboles por cada árbol vivo talado.

La gran planta de baterías afectará a 13 hectáreas de humedales.

La batería más ecológica

Northvolt cree que podrá producir una batería con una huella de carbono un 90 por ciento menor que la de sus principales competidores chinos a principios de la próxima década.

Según la empresa, la energía descarbonizada, es decir la hidroelectricidad producida en Quebec, el reciclaje de metales y las cadenas de suministro cortas, permitirán alcanzar este objetivo.

Northvolt pretende utilizar el 50 por ciento de materiales reciclados.

“La huella de carbono de una batería de Northvolt es de 33 kgCO2e/kW, frente a la referencia del mercado externo de 98 kgCO2e/kW”, según un documento presentado en una rueda de prensa.

Desde que abrió su sede norteamericana en Montreal, Northvolt dijo que firmaron contratos por un total de 138 millones de dólares con proveedores de Quebec y contrataron a 83 empleados que “forman el núcleo inicial del equipo de Quebec”.

La empresa prevé contratar 3.000 empleados en Quebec.

Quebec y Ottawa financian la construcción de la planta de baterías con un coste de 2,740 millones de dólares.

Northvolt espera entregar su primera batería en el verano de 2026.

-Con archivos de La Presse Canadienne