Finlandia cerrará completamente su frontera con Rusia

Finlandia cerrará el último cruce fronterizo abierto que queda con Rusia durante la noche del miércoles al jueves, acusando a Moscú de orquestar un “ataque híbrido” al enviar inmigrantes indocumentados a la frontera.

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Según las autoridades finlandesas, cerca de 1.000 solicitantes de asilo indocumentados, en particular procedentes de Somalia, Irak y Yemen, se han presentado desde principios de agosto en la frontera oriental de 1.340 kilómetros que separa ambos países.

“El fenómeno observado en las últimas semanas en la frontera debe cesar”, afirmó el martes el primer ministro Petteri Orpo, señalando que “la migración instrumentalizada desde Rusia ha continuado”.

Helsinki cerró cuatro de sus ocho puntos fronterizos con Rusia a mediados de noviembre, antes de restringir el paso a un único paso fronterizo, el más septentrional del país en la zona ártica, la semana pasada.

“Finlandia es el objetivo de una operación híbrida rusa. Es una cuestión de seguridad nacional”, subrayó la ministra del Interior, Mari Rantanen.

“A veces las decisiones son simplemente irracionales”, reaccionó Alexander Grouchko, viceministro ruso de Asuntos Exteriores, citado por agencias rusas.

El puesto fronterizo Raja-Jooseppi permanecerá cerrado hasta el 13 de diciembre, afirmó.

Los solicitantes de asilo deberán solicitar protección “en los pasos fronterizos abiertos al tráfico aéreo y marítimo”, es decir, puertos y aeropuertos, según un comunicado del gobierno.

Esta afluencia de inmigrantes “es una actividad organizada, no una verdadera emergencia”, según el Primer Ministro.

“La facilidad con la que los inmigrantes llegaron al remoto cruce fronterizo de Raja-Jooseppi es prueba de ello”, añadió.

“No es sólo el número de llegadas lo que está en juego, sino el fenómeno en sí”, afirmó Orpo.

Las relaciones entre los dos vecinos se han deteriorado considerablemente desde febrero de 2022 y la ofensiva rusa en Ucrania, ataque que llevó a Finlandia, preocupada por su propia seguridad, a unirse a la OTAN en abril de 2023.

Moscú prometió entonces tomar “contramedidas” tras esta adhesión.

“No vengas”

La semana pasada, el gobierno finlandés había considerado cerrar su frontera, pero la autoridad responsable de controlar la legalidad de las medidas gubernamentales consideró que la medida era desproporcionada.

La frontera puede cerrarse completamente en circunstancias excepcionales, pero este cierre debe ser proporcionado y los solicitantes de asilo deben poder presentar su solicitud.

Este cierre es “necesario y proporcionado”, aseguró el gobierno en su comunicado de prensa.

Cuando se le preguntó sobre la atención a los inmigrantes que se quedarían en el frío frente a los pasos fronterizos cerrados, Orpo respondió que “sin el cambio de política de las autoridades rusas, este fenómeno no existiría”.

“Tenemos confianza en el criterio de los guardias fronterizos y en su capacidad para responder a diferentes situaciones”, afirmó.

El ministro del Interior subrayó que los migrantes tienen “la responsabilidad de decidir si vienen o no a la frontera”.

“Nuestro mensaje es claro. No vengas. La frontera está cerrada”, dijo.

Los guardias fronterizos subrayaron que hasta ahora la presión migratoria se había ejercido en los pasos fronterizos y no en el resto de la frontera, en zonas deshabitadas.

Anticipándose al recurso de Moscú a la presión migratoria, Finlandia comenzó a construir una gran valla de más de 200 kilómetros, pero que sólo se completó en tres kilómetros.

Orpo dijo que esperaba que la situación con Rusia se normalizara “lo más rápido posible”.

“Es de interés para todos, incluida Rusia”, añadió.