Un padre y su hijo construyen el dron más rápido del mundo en el garaje familiar

Dos sudafricanos han desarrollado en casa un dron que puede alcanzar una velocidad récord de 480 km/h. Este dron se ha convertido en el más rápido jamás construido hasta la fecha.

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El récord mundial de velocidad, logrado por un dron teledirigido y alimentado por una batería, acaba de ser batido por un YouTuber sudafricano. Controlada a una media de 480,23 km/h en una distancia de 100 m, la máquina acaba de entrar oficialmente en el Libro Guinness de los Récords.

La hazaña tuvo lugar en Worcester, en la provincia de Western Cape, Sudáfrica, el pasado 21 de abril. Además de su récord, el dron registró una velocidad máxima de 510 km/h y una aceleración vertiginosa de 0 a 300 km/h en sólo 2 s.

La hazaña es aún más impresionante porque es obra de dos aficionados, en este caso el YouTuber sudafricano Luke Bell y su padre Mike. Llamado Peregreen 2, el dron estaba compuesto esencialmente de piezas impresas en 3D y desarrollado en el garaje familiar.

Este récord llega justo después de otra demostración de fuerza, firmada por Red Bull en colaboración con la empresa holandesa Dutch Drone Gods especializada en la producción de vídeos aéreos. Como preámbulo de la temporada de F1, Red Bull voló un dron capaz de seguir a uno de sus coches lanzado para dar una vuelta rápida por el circuito de Silverstone, en Inglaterra. Presentado entonces como el dron de ocio más rápido del mundo, había logrado la hazaña de alcanzar una velocidad máxima de 350 km/h. Pero eso ya es cosa del pasado…