Condenan a Perú por violación del derecho a “un ambiente sano”

La Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó este viernes a Perú por violar el derecho de los habitantes de un pueblo minero de los Andes a un “ambiente sano”, en un fallo calificado de “histórico” por los demandantes.

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En su sentencia, la Corte critica al Estado peruano por “la violación de los derechos a un ambiente sano, a la salud, a la integridad personal, a la vida digna, al acceso a la información, a la participación política, a las garantías judiciales y a la protección judicial al perjuicio de las 80 víctimas del caso.

La Oroya, situada a 175 kilómetros al este de Lima y a 3.750 metros de altitud, fue clasificada en 2006 entre las diez ciudades más contaminadas del mundo debido a las actividades de un complejo metalúrgico que durante años procesó cobre, zinc, plomo, plata, oro e incluso selenio de minas vecinas.

Los habitantes de esta ciudad de 20.000 habitantes sufren desde hace décadas una exposición crónica a metales pesados, según los demandantes que recurrieron a la Corte Interamericana, institución dependiente de la Organización de Estados Americanos (OEA), asesorados por ONG.

Para la Corte, con sede en Costa Rica, “el derecho a un medio ambiente sano constituye un interés universal y un derecho fundamental para la existencia de la humanidad”, y las actividades del Complejo Metalúrgico de La Oroya (CMLO) lo han puesto en entredicho.

Según la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH), en 2013, el 97% de los niños de La Oroya de entre seis meses a seis años y el 98% de los de siete a doce años tenían niveles elevados de plomo en la sangre.

La Corte ordenó al Perú realizar un diagnóstico de la contaminación del aire, agua y suelo de la ciudad, brindar atención médica gratuita a las víctimas y adecuar la normativa a los estándares admisibles para plomo, dióxido de azufre, arsénico o mercurio, entre otras medidas.

La Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA), que asesoró a las 17 familias de La Oroya que solicitaron a la Corte, calificó el fallo de “histórico” y dijo que constituye “un precedente esencial para la protección del derecho a un medio ambiente sano en todo el mundo”. el continente americano.