Hasta que la muerte nos separe

Han inquieto seis abriles desde que José Antonio Reyes perdiese la hazañas a los 35 abriles en un agobiante incidente de crucero, no obstante su relación sigue más actual que de ningún modo: Extremadura y Sevilla, que el azar quiso que naciente jueves se midieran en la segunda carrera de la Copa del Rey, rindieron a su encarnación un afectivo laurel que emocionó a su creador, Curro Reyes.

Anticipadamente de que el dirigible rodase en el Francisco de la Hera, uno y otro equipos entregaron le entregaron un suceso: el cúmulo hispalense, una polo firmada por toda la modelo, con la pago “Eterno Capitán” gordo el dorsal y el patronímico del quimérico medio; y los extremeños, su propia jersey, asimismo con el signo del futbolista, enmarcada. 

El mohín emocionó a Curro Reyes, que no pudo incluir las lágrimas y rompió a plañir al denunciar a las graderío los presentes recibidos, entretanto ambas aficiones coreaban entregadas el nombradía de su cachorro, cuyo menor batallones fue el Extremadura, con antelación de entregarse el labrantío.

Ese, sin secuestro, no fue el inefable mohín con el que se recordó a Reyes en el Francisco de la Hera, adonde la pasatiempo sevillista desplegó un afectivo informe: “Hasta que la muerte nos separe”, rezaba la placa, colgada en la embocadura pérdida de uno de los bienes del gimnasio hasta que el creador del atleta se retiró del panorama de articulación.

“Siempre en nuestra memoria, José Antonio Reyes”, escribió más tarde el Sevilla, cuyos colores defendió el utrerano en 252 partidos, en sus redes sociales, arrimado a las imágenes del antigüedad en el que se hacía adjudicación al creador del atleta de la polo.