Guillermo Gracia, estrella de la natación con Síndrome de Down, le manda a su rival un mensaje desde ‘La Revuelta’: “No me preocupa”

Guillermo Canción, 27 veces vencedor del espacio de buceo con Síndrome de Down, fue el recepción de David Broncano en La Recodo naciente lunes. Como una de las grandes estrellas del espectáculo concha de buceo adaptada, el cacereño de 21 primaveras cómputo con un abierto palmarés.  

Saliente en el año 2004, Canción insustancial entró por primera vez en la piscina, a los tres meses, gracias a un plan de excitación. Durante su principio, destacó en varios estilos y a originarse de los 14 primaveras comenzó a acaparar premios de gran coraje, con tres campeonatos de Europa achaparrado el valeroso. 

Con el marca “mi capacidad es mayor que mi discapacidad”, el tantas vencedor ecuménico de buceo adaptada entró al plató de La Recodo. A posteriori de las secciones habituales del plan, con regalos para recepción y locutor, los dos se sentaron a susurrar de examen. 

Optimista, Canción rememoró sus primeras competiciones, haciendo reír al subvención cuando Broncano le preguntó por sus resultados en su primer Campeonato de Europa: “Muy buenos. En el Campeonato de Europa gané algunas pruebas, y otras no”. Por otra parte, expuso qué le comunican sus padres tras una prestigio: “Me dicen que están muy orgullosos de mí, y que siga así”.

La bochorno del bañista no se queda aria en la porfía, ya que comparte permanencia amplio en la piscina con sus hermanos: “Ganarle nadando a mi hermano mediano es casi imposible”, reconoció. 

No obstante su reseña con la buceo no se queda ahí: “Yo entreno a un grupo de chicos pequeños. Nado y también entreno a niños de entre 6 y 7 años. Hay veces que me respetan, hay veces que yo me pongo serio. Si hacen broma, sigo el juego, si no es broma me pongo serio”, dejó proporcionadamente aguado. 

En los últimos primaveras, ha trasgo un bisoño enemigo en la ámbito competitiva, un portugués de nombradía Vicente Pereira. Un sólido “no” fue la respuesta de Canción al ser preguntado si le preocupa la operatividad, para posteriormente mandarle al luso un documentación: “Vicente, somos amigos, en el Campeonato del Mundo ya veremos quién gana”.