Un juez concede la libertad bajo fianza a una mujer de Quebec acusada de quemar a un niño con agua hirviendo

Un juez concedió la libertad bajo fianza a una mujer de Quebec acusada de agresión agravada después de que supuestamente quemó a un niño negro de 10 años con agua caliente a principios de este mes.

Stéphanie Borel, de 46 años, fue liberada bajo una serie de condiciones que incluyen vivir con su hijo y mantenerse alejada de la casa y la escuela de la joven víctima y de un testigo, cuyas identidades están protegidas por una prohibición de publicación.

El 2 de octubre, la policía de la costa sur de Montreal arrestó a Borel, pero la liberó y le ordenó comparecer ante el tribunal en una fecha posterior.

RELACIONADO:

El niño sufrió quemaduras de segundo grado en la cara y la parte superior del cuerpo, y sus padres y otros miembros de la comunidad denunciaron lo que dijeron fue el trato indulgente que recibió la mujer por parte del sistema judicial.

Tras la protesta, fue arrestada el 11 de octubre y permaneció detenida hasta la audiencia de fianza de hoy.

Le dijo al tribunal que desde su detención, el propietario canceló su contrato de arrendamiento y ella perdió su trabajo como ordenanza.

El juez del tribunal de Quebec, Serge Delisle, ordenó su liberación después de escuchar a la defensa y a la Corona. Su caso volverá ante un juez el 23 de enero de 2025.

La decisión del 2 de octubre de liberarla generó intensas críticas, y un grupo de defensa acusó a la policía de ser indulgente con una mujer acusada de agredir a un niño negro. La Coalición Roja, un grupo de presión con sede en Montreal que se centra en la lucha contra el racismo, escribió una carta a la alcaldesa de Longueuil, Catherine Fournier, y al jefe de policía, Marc Leduc, pidiendo que se detuviera a Borel.

“Les pedimos que consideren, por un momento, si los papeles se hubieran invertido: si un hombre negro hubiera arrojado agua hirviendo a una niña blanca de 10 años”, escribió el director ejecutivo Joel DeBellefeuille. “Es difícil imaginar que se le hubiera permitido quedar en libertad mientras esperaba el juicio. En lugar de ello, probablemente lo habrían detenido inmediatamente, enfrentando graves consecuencias legales desde el principio”.

Este informe de The Canadian Press se publicó por primera vez el 31 de octubre de 2024.