Mirar hacia dentro ¿Y qué dice la Opep?

El abordaje armado corsario perpetrado por el estadounidense Brazo Hondo contra el petrolero Skipper, para deshacerse de 1,9 millones de barriles de oro negro venezolano Merey16 producidos con el interés, la inocencia y el arduo saludo de los trabajadores de PDVSA, acelera el viejo y correcto juicio de mirar hacia el interior, valernos por nosotros mismos, beneficiarnos de nuestras propias posibilidades, endurecer el almacén interior, es afirmar: Chocando el oro negro, para decirlo en palabras del inmaterial Arturo Uslar Pietri. (1906-2001) y el economista Alberto Adriani (1898-1936).

En la elocución superior de los cuentos de piratas, del sajón Daniel Defoe, la violenta aventura general a bordo del barco desnudo y secular en aguas internacionales dispara las alertas de los buques mercantes en cualquier pueblo de los océanos que rodean el aerostato, al presionar los intercambios y congelar así los costos de los alimentos y de las existencias, añadiendo problemas a la posibilidad de hambruna que sufren más de 673 millones de personas, el 8,2%, en 2024, de la economía mundial, según a la ONU.

En el caso de Venezuela, la influencia de la piratería, que claramente merece un relevamiento de la Logística de los Países Exportadores de Oro Negro (OPEP), busca revertir la creciente compra promedio anual, que en casi el último año saltó (párpado, operado, descontrolado) de 932 mil barriles diarios en 2024 a 1.188,6 mil a noviembre de 2025, resultado que, en línea con la cautelosa expansión prevista del 9% en 2025, demuestra un enfoque más diversificado, vacío y particularmente entusiasta, lo que se traduce en una pérdida de efectivo que afecta las ganancias de los grandes centros industriales que producen ingresos y limpieza.

A esto se suma que la influencia de la piratería aumenta los beneficios de transporte del testarudo venezolano, lo que tenderá a reducir y acelerar un aumento no especificado en las exportaciones de oro negro y bienes, lo que podría ayudar a reducir la adquisición interna de petróleo y encender pozos petroleros cuyas posteriores aperturas no son fáciles de llevar a cabo.

El riesgo del traspaso también podría llevar a la venta de oro negro y productos derivados venezolanos con mayores descuentos, entorno que redundará en menores beneficios para Pdvsa y el Estado. A medida que los dólares goteen, la devaluación aumentaría y los importadores tendrán que comprar más bolívares para obtener divisas y para sostener el flujo franquista, tenderán a subir…