Instan a Ottawa a implementar todas las medidas del C-21

Los defensores de un mayor control de armas están haciendo sonar la alarma e instando a Ottawa a implementar las disposiciones de su proyecto de ley C-21 destinadas a proteger a las víctimas de violencia de pareja.

Aunque ha pasado casi un año desde que el proyecto de ley C-21 recibió la aprobación real, las medidas para impedir que personas consideradas peligrosas tengan una licencia de armas de fuego aún no se han hecho realidad.

“Es absolutamente urgente que estas medidas entren en vigor porque […] es una cuestión de la vida y la seguridad de las mujeres y los niños. Creemos que el gobierno debería priorizar estas medidas y no dejarlas flotar”, afirmó Suzanne Zaccour, directora de asuntos jurídicos de la Asociación Nacional de Mujeres y Derechos, en una rueda de prensa el lunes.

A la ocasión acudieron familiares de víctimas de violencia doméstica. Tara Graham, quien dijo que perdió a su madre a manos de una pareja abusiva, expresó su tristeza por el hecho de que los asesinatos de este tipo estaban lejos de ser casos aislados.

La directora del Observatorio Canadiense de Femicidios para la Justicia y la Rendición de Cuentas, Myrna Dawson, afirmó que desde 2018, al menos 219 mujeres y niñas han sido asesinadas con armas de fuego. Este método de matar se utiliza en aproximadamente un tercio de los asesinatos de mujeres cada año, afirmó.

Nathalie Provost, superviviente de la masacre de la Polytechnique, subrayó que no hay un calendario para la aplicación de las medidas del C-21 que todavía no están en vigor.

El sitio web del Gobierno de Canadá se limita a indicar que estas deben implementarse “más adelante”.

La página web dice: “Algunas medidas ya están en vigor, mientras que otras entrarán en vigor más adelante para permitir el desarrollo de nuevos sistemas o el desarrollo de nuevas regulaciones, o para movilizar provincias y territorios, socios indígenas y partes interesadas”.

El secretario de prensa del ministro de Seguridad Pública, Dominic LeBlanc, aseguró que Ottawa “entiende completamente la urgencia de actuar”.

“El ministro LeBlanc también dio instrucciones a sus funcionarios para que pongan en vigor lo antes posible la ley de bandera amarilla, que se refiere a la suspensión de la licencia de armas de fuego en casos de violencia doméstica o de género”, dijo el portavoz Gabriel Brunet por correo electrónico.

Los grupos que defienden a las mujeres maltratadas también pidieron a los líderes de todos los partidos de oposición que se comprometan a implementar las disposiciones del proyecto de ley C-21.

Provost quería enviar un mensaje específico al líder conservador Pierre Poilievre.

“Él piensa que estamos hablando de armas porque estamos en contra de los propietarios de armas. No lo somos. Estamos por la seguridad de los canadienses, las mujeres y los niños”, dijo.

Los conservadores se opusieron al C-21 durante todo su estudio parlamentario. El Bloque y los Nuevos Demócratas apoyaron el proyecto de ley.

–Este informe de La Presse Canadienne fue traducido por CityNews