dos partidos de suspensión y 10.000 euros de multa

José Mourinho ha sido y será siempre una de las figuras más exitosas y polémicas de la historia del fútbol, y no ha dejado de demostrarlo allá donde ha ido. En Italia le conocen de sobra, pero eso no ha impedido que esta semana haya vuelto a protagonizar una de sus habituales salidas de tono. 

El entrenador del Roma ha sido sancionado con dos partidos de suspensión y una multa de 10.000 euros, después de ser expulsado el pasado martes en el partido que su equipo perdió contra el Cremonese (2-1), equipo que no había ganado hasta el momento un solo encuentro en toda la campaña de Serie A.

Un resultado frustrante para las aspiraciones del conjunto romano, cuya impotencia quedó reflejada en el comportamiento de Mourinho. El juez deportivo, a raíz del testimonio del árbitro del encuentro, ha considerado que el técnico “contestó de manera vehemente y con una actitud provocativa una decisión arbitral“, tras un encontronazo con el cuarto árbitro al comienzo de la segunda mitad.

Sin embargo, también es cierto que Mourinho ha sido en muchas ocasiones prejuzgado por ser un personaje sincero, directo y sin pelos en la lengua, y por ello no dudó en defenderse tras el encuentro: “Necesito saber si existen grabaciones de audio de lo que me ha dicho. No quiero entrar en la cosa de que él sea de Turín y que nosotros jugamos contra la ‘Juve’ esta jornada y me quiera fuera del banquillo“.

“Tengo que saber si puedo hacer algo desde el punto de vista legal, porque el árbitro me expulsa porque el cuarto árbitro le ha dicho que lo haga. Lamentablemente el cuarto no ha tenido la honestidad de decirle a su compañero lo que me ha dicho, el modo en el que me lo ha dicho y el modo en el que me ha tratado, que obviamente ha generado mi reacción”, añadió, denunciando un comportamiento poco profesional del cuarto árbitro del partido hacia su persona.

“La gente que me conoce desde hace muchos años sabe que soy emocional, pero no estoy loco. Y para haber tenido una reacción como la que he tenido es porque ha sucedido algo”, explicó el de Setubal, que se marchó expulsado en el minuto 47, nada más arrancar la segunda parte. “A lo mejor es la primera vez en mi carrera que un cuarto árbitro ha hablado conmigo de un modo injustificable“, apuntó.

“He ido al vestuario de los árbitros cuando ha terminado el partido. He tenido la fortuna de que Piccinini (árbitro principal) fue el cuarto en un partido en el que yo fui expulsado por hablar mal al árbitro, y me vio bajar al vestuario y pedirle perdón en su día. Hoy Piccinini me ha visto entrar y decirle al cuarto: ‘quiero que seas honesto y digas lo que ha pasado‘”, sentenció, aunque no parece que el asunto vaya a esclarecerse a favor del técnico luso.