Bayern de Champions League, en directo: última hora de la tercera jornada de la fase de liga

Auténtico recital del FC Barcelona para arrasar a su bestia negra, el Bayern de Múnich, en la tercera jornada de la Champions League, y dejar claro antes del Clásico ante el Real Madrid que va a por la ‘Orejona’.

Un único minuto de juego le bastó al Barça para dar un golpe en la mesa. No iba de farol, iba a jugar la Champions. Lo demostró cuando Raphinha abrió la lata, regateando a Neuer para marcar después de que Fermín López, que volvió a la titularidad, le dejase solo en el área aprovechando que la defensa bávara aún dormía.

Se hizo notar entonces el dominio blaugrana. Pero con el paso de los minutos, el equipo de Flick se diluyó y el Bayern creció. Y llegó el empate. La conexión Olise-Müller venía avisando constantemente por la derecha, hasta que al final tuvo éxito cuando Kane llegó al remate para perforar la meta de Iñaki Peña. Pero no subió al marcador, porque el alemán había arrancado en fuera de juego. Respiró el Barça, aunque no le duró mucho.

Antes de que se cumpliese el 20’, el ariete inglés puso las tablas en el marcador con un remate acrobático en el que el meta blaugrana no pudo hacer nada. Esta vez la jugada fue por la izquierda, y Gnabry, el asistente. Lo pasó mal entonces el Barça, que hizo de tripas corazón para recuperar el control cuando más lo requería el partido. Despertó con otra jugada de Raphinha, que aguantó a la llegada de Lewandowski para dejársela, pero el polaco no encontró portería.

Fue con una jugada made in La Masía con la que el Barça hizo pequeño al Bayern: Lamine se la picó a Fermín, que vio como Min se la comía, y la peleó ante Neuer, dejándola franca para que Lewandowski hiciese el segundo a placer. Justo antes del descanso, Raphinha volvió a hacer magia: Casadó le puso un balón largo a la derecha y el brasileño clavó un zapatazo al palo largo para aumentar la ventaja del Barça al descanso.

Y la exhibición continuó en la segunda parte. Lejos de confiarse, los de Hansi Flick volvieron al césped con hambre y a los 10 minutos cerraron la goleada. Fue, quién si no, Raphinha, que completó su hat-trick con una jugada de élite: bajó el balón con el pecho, pisó área y batió a Neuer con un disparo raso cruzado.

Pudo hacer más sangre el cuadro culé ante un Bayern abatido, pero el balón no volvió a entrar. No importó, Montjuic ya era una fiesta. La siguiente parada es el Clásico, al que el Barça llega líder y pleno de confianza, con Raphinha citándose con Vini.