Una asistente de pacientes de Quebec, sorprendida durmiendo en el trabajo, pierde su caso

Una asistente de atención al paciente de Quebec que fue despedida después de que su jefe la sorprendiera durmiendo en el trabajo, perdió su caso.

Ella impugnó su despido, pero la Junta de Relaciones Laborales falló a favor del asilo de ancianos privado que la empleaba.

El encargado trabajaba solo por la noche en esta residencia, que alberga a 22 residentes independientes o semiindependientes.

El Tribunal informa que, desde el invierno de 2023, la residencia había recibido quejas de los residentes o de sus familiares de que “a menudo no hay nadie en la conserjería por las noches para atender las necesidades”.

El gerente consultó con la demandante, quien respondió que simplemente debía estar ocupada en otra parte de la residencia.

Como el administrador había comprado la residencia recientemente, consultó con los propietarios anteriores, quienes le dijeron que había rumores de que la empleada en cuestión “a menudo duerme durante su turno”.

Por lo tanto, el gerente fue a la residencia varias noches seguidas para comprobar el comportamiento del encargado.

El Tribunal resume el testimonio del empleador: “En resumen, alrededor de la medianoche, la demandante apaga las luces de su oficina y se acomoda a dormir en la sala ubicada en el sótano del edificio. No la despierta porque quiere ver si su comportamiento se repite. En cambio, recorre las habitaciones de las residentes a la 1 am, 2 am y 3 am “

“A las 4:10, escucha una alarma en el teléfono de la denunciante. Ella se despierta, sube las escaleras y se dirige a su oficina. Repite la misma rutina todas las noches. La mañana del 28 de junio, él le pide que abandone el local y le informa que está suspendida”, relata la jueza administrativa France Legault.

El empleador dijo al Tribunal que había tomado fotografías pero que no podía presentarlas como prueba porque su cámara se había roto. Sin embargo, el antiguo propietario, a quien había mostrado las fotografías, declaró en una carta que las había visto.

El asistente admitió haberse quedado dormido una noche, pero sostuvo que se trató de un incidente aislado debido a un mareo.

Su empleador finalmente la despidió. Ella impugnó el despido, pero el Tribunal acaba de desestimar su denuncia.

“Al elegir dormir durante varias horas en lugar de hacer las rondas requeridas y proporcionar el nivel mínimo de supervisión, no cumplió con los deberes esenciales de su puesto. Esta acción expone a los residentes a riesgos reales y graves. Como enfatiza la jurisprudencia, los residentes y sus seres queridos deben tener confianza en que el personal está atento y presente en todo momento para responder a sus necesidades”, escribió el Tribunal.

“La jurisprudencia reconoce que quedarse dormido en el trabajo cuando la vigilancia es esencial para la supervisión y seguridad de los clientes vulnerables constituye una falta de conducta excepcionalmente grave.

“La falta cometida por el denunciante es tan grave que justifica desconocer el principio de graduación de las sanciones”, concluyó el juez administrativo.

–Este informe de La Presse Canadienne fue traducido por CityNews